miércoles, 10 de mayo de 2017

Volverte a ver


El tiempo pasó...

Tú allá, yo aquí,
sereno, tranquilo, con el alma en paz.

Tú siempre tan hermoso, tan galán,
tan dueño de ti, de tu espacio,
tan hombre, tan sencillo pero interesante.

Yo con la experiencia dibujada en cicatrices,
cada experiencia recorrió mi piel y dejó una marca,
tantas historias que tuve que vivir para después contar,
la sonrisa nunca desapareció de mi rostro.

Ven, dame tu mano,
quiero entrelazar mis dedos entre los tuyos,
como antes cuando caminamos juntos a la orilla del mar,
esa playa que hicimos nuestra,
con tus ocurrencias grabaste tu recuerdo en mi.

Ven, no tengas miedo,
no te juzgo que hayas buscado a alguien más en mi ausencia,
después de todo yo fui el culpable que te fueras,
con mi necedad te obligué a que te fueras,
que ya no me vieras, que ya no me quisieras.

¿Mañana?
la verdad es que es algo en lo que debemos pensar juntos,
recuerda que todo siempre fue hablado entre los dos,
de ahí que todo lo nuestro se convirtiera en una historia fantástica,
llena de buenos momentos, más que malos.

Ven dame tu mano y sigamos caminando,
ya no tú por tu lado, ya no yo por el mío,
ambos mirando al mismo rumbo, 
cosechando momentos cada vez,
tú a tu manera, yo a la mía.

Después de todo, lo que fue alguna vez...
Aún vive en mí, ¿aún vive en ti?

(Volverte a ver, volverte a ver, yo te quiero querer)